Tenía 15 años. La ansiedad le desbordaba. Dudó mucho, pero su camarada insistió hasta que acabó cediendo. Por un lado era un adolescente que perdería la virginidad y, por otro, reproducía en mí el estigma social que tiene el consumo de prostitución. Dieciséis años después de su primera vez, aquel chico titubeante se muestra firme y relajado durante la entrevista. Aunque en determinados círculos lo conocen como el putero de izquierdas, ya que es militante de Podemos, no le molesta el apodo. Y apostilla: Una sociedad moderna no puede vivir en la mentira. La investigadora a cargo del estudio, Carmen Meneses, señala que la edad de iniciación ronda los 23 años. Pese a ello, son pocos los que dan la cara.
Sé lo que tengo: bonitos ojos, linda cara, buen busto, cola bien, y unos cuantos gorditos. Sé lo que puedo dar: lo mejor. Y el cliente, cuando se da cuenta de ello, me solicita. Por eso soy cara. Por eso valgo. Trabajo como acompañante con una agencia.
Durante seis largos años, desde que tenía 16 y hasta que cumplió los 22, sufrió explotación sexual. Pero perdió su empleo, acabó en la piso y cayó en las garras de la prostitución. Logró, con mucho ahínco, salir de aquella pesadilla. Ha apuntado tres libros sobre el tema, incluido uno que lleva por título Ninguna mujer nace para puta. BBC Globo habló con ella. Lo creo firmemente, estoy convencida de ello.
Reales. Contactos Hombres. En Ahualulco de Lonja Jalisco. Agencias en EE. UU Todas las ciudades. Soy macho. Dom. Solo chicas interesadas.